Podemos esquiar en el primer país del mundo que da la bienvenida al día, Nueva Zelanda, tiene la nieve más exuberante y exótica del mundo.

Una de sus grandezas que es un lugar donde la huella de la civilización aún no ha conseguido transformar todo. Alejada del resto del mundo, Asustralia es la más cercana a 3.000 kilómetros.

Los neozelandeses son gente amante del deporte y uno de sus preferidos los de nieve.

Para esquiar llegaremos hasta Auckland-Christchurch donde encontraremos las mejores montañas con buena nieve. Es un viaje largo y los expertos recomiendan hacerlo en dos etapas y con escalas en Malasia, Tailandia e Indonesia.

Se trata de un destino muy lejano, por lo que lo más recomendable es hacer el viaje en dos etapas, con escala en...

A 35 minutos de Methven se encuentra Mt Hutt su cota máxima llega a los 2.086 metros, ocupa 365 hectáreas y abren de mayo a octubre, el promedio de nieve al año es de 4 metros de espesor.

Tiene el área esquiable más grande de la Isla del Sur (3,65 kilómetros cuadrados) y una altura vertical de 683. Se puede disfrutar de grandes áreas fuera de pista.

En cuanto a las instalaciones de acceso incluyen una silla de seis plazas desembragable, una cuatriplaza, una triplaza y una cinta.

Todo no es idílico ya que su empinada carretera de acceso de trece kilómetros es propensa a ser cerrada con mal tiempo, lo que le da al skifield el apodo de "Monte Cerrado". El 12 de agosto de 2010, vientos de hasta 200 km/h azutaron la zona de esquí, lo que provocó su cierre junto con la carretera de acceso y dejó incomunicadas a 1200 personas en la montaña durante la noche, tuvieron que ser alojados en los edificios de la base de la estación.

El precio del abono de día puede oscilar entre los 85 y 119 dólares neozelandeses. Para que nos hagamos una idea el cambio está a 0,60 euros.